para: riqueza@dinero.us
El "Templo de Salomón" del siglo XXI
La “Torre de Babel” del siglo XXI
El hombre del siglo I que intentó limpiar
el “Templo de Jerusalén”.
La riqueza es una ilusión y
el dinero está hecho solo de papel.
La riqueza es una ilusión y
los bancos son sus templos.
El mercado bursátil es, de hecho, simplemente un mercado
para esta misma ilusión de papel.
Por una vez, no culparé a George W. Bush
ni a los Estados Unidos de América
ni a quien haya inventado la avaricia y el capitalismo.
Por el contrario, les agradezco a ambos
por demostrarnos a dónde lleva esto.
No le pediré a los mercados bursátiles que se conviertan al Islam
ni espero que esto suceda algún día porque
el capitalismo no se sumará a (alguna) religión
Miren, por favor, a Riyad , Dubai y Kuwait
para confirmar mi punto de vista.
Dubai está reconstruyendo la Torre de Babel
y los Jardines Colgantes, nadando todos en mar abierto,
¿Para quién? Y ¿para qué?
(vuelven a reclamar el mar, cuando detrás de ellos
se halla el infinito desierto vacío,
y cuando los nuevos habitantes e
incluso sus obreros son importados)
¡Avaricia, avaricia y más avaricia!
La economía de Islandia acaba de ser vendida a Rusia
y los Templos del Capitalismo prácticamente han sido nacionalizados,
lo cual debió realizarse desde el inicio.
¡Avaricia, avaricia y más avaricia!
El Islam les pide a los creyentes compartir con los pobres
un décimo de las ganancias propias anuales,
lo cual humaniza al capitalismo
cada diez años, completa y repetidamente.
Es una rehumanización perpetua y renovada del capitalismo.
Nosotros, los cristianos, debemos hallar algo similar o mejor,
si podemos.
Jesús utilizó solo una vez su "fuerza física"
y fue contra aquellos prestamistas (banqueros).
Y la otra Buena noticia es que
los barrios bajos de Mumbay, Río y El Cairo,
de hecho, todos los barrios bajos del mundo entero,
no sufrirán tanto esta vez.
¡Aguanten!
Jesús está de regreso,
con un Noble Corán en su mano izquierda,
¡y un garrote en su mano derecha!
Raja Chemayel
Un cristiano en el Islam
Lunes, 13 de Octubre de 2008
El "Templo de Salomón" del siglo XXI
La “Torre de Babel” del siglo XXI
El hombre del siglo I que intentó limpiar
el “Templo de Jerusalén”.
La riqueza es una ilusión y
el dinero está hecho solo de papel.
La riqueza es una ilusión y
los bancos son sus templos.
El mercado bursátil es, de hecho, simplemente un mercado
para esta misma ilusión de papel.
Por una vez, no culparé a George W. Bush
ni a los Estados Unidos de América
ni a quien haya inventado la avaricia y el capitalismo.
Por el contrario, les agradezco a ambos
por demostrarnos a dónde lleva esto.
No le pediré a los mercados bursátiles que se conviertan al Islam
ni espero que esto suceda algún día porque
el capitalismo no se sumará a (alguna) religión
Miren, por favor, a Riyad , Dubai y Kuwait
para confirmar mi punto de vista.
Dubai está reconstruyendo la Torre de Babel
y los Jardines Colgantes, nadando todos en mar abierto,
¿Para quién? Y ¿para qué?
(vuelven a reclamar el mar, cuando detrás de ellos
se halla el infinito desierto vacío,
y cuando los nuevos habitantes e
incluso sus obreros son importados)
¡Avaricia, avaricia y más avaricia!
La economía de Islandia acaba de ser vendida a Rusia
y los Templos del Capitalismo prácticamente han sido nacionalizados,
lo cual debió realizarse desde el inicio.
¡Avaricia, avaricia y más avaricia!
El Islam les pide a los creyentes compartir con los pobres
un décimo de las ganancias propias anuales,
lo cual humaniza al capitalismo
cada diez años, completa y repetidamente.
Es una rehumanización perpetua y renovada del capitalismo.
Nosotros, los cristianos, debemos hallar algo similar o mejor,
si podemos.
Jesús utilizó solo una vez su "fuerza física"
y fue contra aquellos prestamistas (banqueros).
Y la otra Buena noticia es que
los barrios bajos de Mumbay, Río y El Cairo,
de hecho, todos los barrios bajos del mundo entero,
no sufrirán tanto esta vez.
¡Aguanten!
Jesús está de regreso,
con un Noble Corán en su mano izquierda,
¡y un garrote en su mano derecha!
Raja Chemayel
Un cristiano en el Islam
Lunes, 13 de Octubre de 2008
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