Una respuesta para el Sr. Robert Fisk, el periodista especializado con más experiencia sobre medio Oriente que yo conozca…
No culpéis a la víctima
ni alimentéis a la bestia.
No os ocultéis tras la democracia,
porque la necesitamos.
Devolvednos nuestra esencia primeramente
y solo después comenzaremos la fiesta.
Devolvednos el Nilo y el Éufrates,
devolvednos Jerusalén y Riad.
Saliros de Rabat y Amán,
abandonad Kuwait y Yemen.
Regresadnos a Haroom al Rachid,
Emir Abdel Kader,
Gamal Abdel Nasser o
George Habash.
Regresadnos nuestra bandera,
nuestra cultura, a todos nuestros Profetas.
¡Guardaros vuestros santos!
Llevaros a vuestros cruzados y a Tony Blair.
Llevaros a todos los israelíes ojiazules,
¡porque no es justo!
Dejadnos hambrientos de nuestra identidad,
hambrientos de nuestro propio pan,
hambrientos de nuestro propio alfabeto.
No culpéis a las víctimas,
más bien culpad a vuestra avaricia.
Nosotros no violamos a Andalucía,
nos casamos con ella y le hicimos el amor,
pero ellos masacraron a nuestros niños andaluces.
Nosotros no plagiamos a los filósofos griegos,
los tradujimos e inmortalizamos.
Aníbal actuó en defensa propia
y Salah El Deen (Saladino) evacuó pacíficamente.
Le concedió la amnistía a los cruzados cuando
vuestro diccionario aún no incluía tal palabra.
No nos culpéis por no ser vosotros y
no culpéis a vuestras víctimas
por desangrarse en vuestras alfombras
o en vuestro subterráneo londinense.
Sed bienvenidos a mi Beirut,
pero por favor respete nuestros semáforos;
se han pagado con demasiada sangre.
El rojo significa prohibido y
el verde no autoriza a nadie a pasar sobre nosotros.
Sherlock Hommos
Beirutí desde 1948, árabe desde Zenobia, cristiano desde Herodes y musulmán desde Abraham.
1 de agosto de 2009