domingo, 15 de agosto de 2010

La inconveniente verdad

Cuando Siria dejó de ser el sospechoso preferido, comenzaron a acusar a Hezbollah.


Rafik El Hariri fue asesinado por alguien
que odiaba a Líbano y Siria.
La prensa mundial sólo pudo encontrar
a un sospechoso y así sucedió.
La diferencia fue que los medios creyeron que fue Siria,
pero sinceramente siempre dije que había sido el Estado de Sión,
o alguno de sus títeres.

Se estableció una corte muy caro en La Haya,
no lejos de mi oficina,
¡sólo para ocupar nuestros estacionamientos!
Esta corte sólo quería asustar a Siria
y amenazar al único gobierno árabe
que aún se enfrenta al tumor sionista en nuestro medio.

Mientras tanto, el Estado de Sión sigue sin levantar sospechas,
e hipócritamente de pie a un costado de la cancha .

Mi héroe favorito, El Sayyed Hassan Nasrallah
ha presentado esta semana las evidencias más plausibles
y más lógicas de la culpabilidad israelí.
Ahora falta ver si Occidente se da cuenta
cuando esta verdad se torne inconveniente.

Raja Chemayel
Once de agosto de 2010

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