¿Quién tolera, y qué?

para: toler@ncia.eu

Tolerar sólo un color no es tolerancia.

De alguna manera, las culturas occidentales protegen
sus valores contra todas las civilizaciones más valiosas
que provienen de Oriente.

De hecho, de Oriente llegaron el judaísmo y el cristianismo.
El judaísmo terminó en Auschwitz,
mientras que el cristianismo terminó en los palacios reales de Europa.

Hoy, el judaísmo se ha mudado de los Ghettos
para residir en todos los bancos centrales y universidades,
mientras que el cristianismo se volvió rehén en manos
de los políticos occidentales.

El Islam, que también llegó de Oriente,
está siendo combatido y bloqueado por muchas políticas
irracionales, populistas, histéricas e infantiles.

En Suiza,
podéis construir una mezquita, ¡pero sin minarete!
En Bélgica,
podéis visitar un club nudista, ¡pero sin usar burqa!
En Holanda,
podéis ser el alcalde de la ciudad más grande,
¡si se es musulmán moderado!
En Francia,
podéis terminar tus estudios, ¡si muestras tu cabello!
En Dinamarca,
un hombre puede casarse con otro hombre,
¡si acepta las caricaturas blasfemas!

La tolerancia es la regla, ¡pero el Islam es su excepción!
Se aplica la tolerancia sólo a lo que nos gusta.
Mi hija, que estudia "Orientalismo" en la universidad,
asistió este invierno a 6 discursos sobre (los valores del) sionismo
y ninguno sobre baathismo o naserismo ni la Nahdat.

Sí, la tolerancia es linda, pero todo depende de:
¿Quién tolera, y qué?


Raja Chemayel
Para volverse tolerante, ¡comencemos tolerando!
21 de Mayo de 2010