domingo, 28 de noviembre de 2010

Como dice el proverbio...



Alguien quiere hacer ejercicios militares en su vecindario.


El proverbio versa:
Dime quiénes son tus amigos,
y te diré quién eres.
Lo mismo es válido para:
Dime quiénes son tus enemigos,
y te diré quién eres.

Estados Unidos tiene amigos y enemigos.
El reino de Arabia Saudita y la República de Egipto
cuentan ambos como amigos y aliados.

En Arabia Saudita cualquier judío visitante
ni siquiera tiene derecho a recibir una visa
(a menos que su nombre sea Paul Wolfowitz o Henry Kissinger o Richard Perle).
En Egipto no se pueden construir iglesias.
En Arabia Saudita no se celebran elecciones y ni siquiera hay parlamento.
En Egipto hay parlamento y se celebran elecciones,
pero el presidente nunca ha perdido.

Por otra parte, los enemigos de Estados Unidos serían
la República Islámica de Irán, que tiene un parlamento
e incluso un judío como miembro del mismo.
Las elecciones en Irán son tan buenas como en cualquier otro lugar,
aunque la los medios occidentales tienen su propia opinión.
Los reporteros occidentales utilizan un microscopio en lugar de cámara.
Si un cristiano iraní quisiese construir una iglesia, podría hacerlo.

Otro enemigo de Estados Unidos fue la República de Iraq
que era una estado laico con un vicepresidente cristiano.
Había iglesias cerca de las mezquitas y aún hay sinagogas.
Estados Unidos colgó al presidente de Iraq porque
nunca logró tener una bomba nuclear.
Si Saddam Hussein hubiese tenido una,
estaría tan vivo como el presidente de Corea del Norte
o as como el primer ministro israelí.

Conclusión:
So quieres maltratar judíos y cristianos,
tienes que ser amigo y aliado de Estados Unidos.
De otro modo, consigue una bomba atómica
y agrede a Corea del Sur y eventualmente también
a Estados Unidos como lo hace Israel

Raja Chemayel
Me gustaría construir una iglesia en Corea del Norte, pagada por las cuentas secretas de Hosni Mubarak en Liechtenstein.
28.11.10

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